Comen y juegan menos, duermen más horas, visitan con frecuencia el rincón favorito de su compañero desaparecido y buscan más el afecto del dueño. Por si nos quedaba alguna duda, nuestras mascotas experimentan sentimientos muy parecidos a los nuestros cuando falta su mejor amigo.
Cuando Max, un perro pastor alemán murió dada su avanzada edad, Negre, su compañero de juegos, sintió tanto su muerte que durante un tiempo estuvo llevando un trozo de pan duro al rincón favorito de su amigo. Iba almacenando el pan según su dueña se lo iba ofreciendo. Estaba apagado, deprimido…
Sí, los animales tienen sentimientos similares a los humanos y cuando pierden a su mejor amigo sufren como nosotros. Este dato que intuíamos, ha sido investigado por la Fundación Morris Animal, que recientemente publicó un estudio realizado en torno a este tema a 279 propietarios de mascotas de Australia y Nueva Zelanda. La investigación se llevó a cabo mediante un cuestionario distribuido por clínicas veterinarias y varias organizaciones de bienestar animal y los resultados aparecieron el pasado 3 de noviembre de 2016 en el periódico on line Animals.
Según dicha investigación, los dos tipos de cambio conductual más comunes se referían a la demanda de afecto y al territorio. “Tanto los perros como los gatos exigían más atención de sus dueños, se mostraban más cariñosos y pasaban más tiempo rondando el rincón favorito del animal doméstico desaparecido”, desvelaba el estudio. Los perros, según relataban la mayoría de propietarios consultados, “comían menos y más despacio y se pasaban más tiempo durmiendo, mientras que los gatos habían aumentado la frecuencia y la intensidad de sus maullidos”.
Nuevas investigaciones podrían ayudar a establecer si estos cambios conductuales tienen lugar por la afección de las mascotas debido a la pérdida, por la influencia de un cambio de ánimo en el comportamiento del propietario, o por la reducción de la competición por la atención del propietario y los recursos, tras la muerte del compañero.
¿Qué podemos hacer si se deprime?
Aparte de la investigación citada, otro estudio anterior, realizado por la Sociedad Americana de Lucha contra la Crueldad hacia los animales (ASPCA) indica que 7 de cada 10 mascotas muestran signos visibles de depresión tras la pérdida de su compañero.
- Si observamos que nuestra mascota está abatida y muestra la mayoría de los síntomas descritos anteriormente, puede ser necesario acudir a un etólogo canino que le ayude a superar la tristeza que padece.
- Otras buenas opciones son: animar a nuestra mascota a retomar sus actividades favoritas, jugar durante más tiempo con ella al aire libre o concederle alguna recompensa comestible durante los primeros días de duelo, para ayudarle a sentirse reconfortada. Dedicarle una atención mayor, tanto a perros como a gatos, con masajes y mimos… será el mejor consuelo que podrán encontrar en nosotros.
0 comentarios